5/30/2007

CINE - Cosas de Magos

Desde el viejo antepasado nuestro que, sentado al fuego de su cueva, impresionaba a sus semejantes con un torpe movimiento de manos que era suficiente, aduciendo una "explicación mística" lo "mágico" o "esotérico" ha tenido un lugar de especial importancia en nuestro quehacer, y ni la literatura ni el cine han obviado tan tamaña parte de nuestro imaginario.

Hoy me ocupa reseñar dos películas que, aunque distintas, tienen en común el toque de asombro y la construcción en claroscuros que la magia -en especial la de salón- requieren, junto con personajes de lo más particulares.
La Primera de ellas, El gran Truco (The prestige, 2006) es dirigida por Christopher Nolan (Insomnia, Memento , Batman Returns) y está además basada en la novela de Christopher Priest, The prestige (El Prestigio, en español) que relata la rivalidad entre dos magos. El espectacular -aunque no demasiado ingenioso- Robert Angier (Hugh Jackman) y el misterioso y brillante,pero poco lucido Alfred Borden(Christian Bale) quienes, de ser compañeros en un espectáculo de magia, desarrollan una rivalidad que poco a poco, irá llegando a más de un extremo.

Ambientada en la Inglaterra y la norteamérica de finales del siglo XIX y principios del XX (en todo caso, antes de la gran depresión) la película transita con todo detalle, en retrospectiva, ya que los hechos se inician con la muerte de Angier, un "crimén" por el que Borden será condenado, sin pausa somos introducidos a una evolución en parálelo de su rivalidad (como si la simetría fuese en realidad un elemento más que significativo de la trama, cosa que efectivamente, sucede.) a través de la lectura mutua de los diarios de ambos, los sucesos comentados por otros observadores: en especial el ingeniero Cutter, un magistral Michael Caine quien parece ser el único suficientemene sensato (o desapasionadamente inglés) en una situación donde el antagonismo raya en la obsesión.

Otros tres personajes merecen también atención: primero, la esposa de Borden, Julia Mc Cullough (Piper Pearbo) quien se debate entre la seguridad de un hombre que ama y el terror que le produce no conocerlo.

En segundo lugar, Olivia Wenscombe (la espectacular Scarlett Johansson) quien,ilusamente, trata de apartar a Angier de su obsesión -y acaba atrapada en la telaraña de Borden en el proceso.- Y finalmente, al gran David Bowie en el papel del tan brillante como misterioso Nikola Tesla que si bien para el Neófito puede pasar como alguien "esóterico" (revelando claves secretas y verdades aparentemente ocultas a Angier, no sólo acerca de su invento, sino de los peligros de dejarse llevar por una obsesión) y sin embargo, más que hablarnos de cuestiones estrictamente esotéricas, Tesla y sus preocupaciones aparecen claramente como la expresión de la preocupación central de la ciencia, la búsqueda de un propósito real para el conocimiento (cual es labor de la técnica, la tecnología y en último caso, de la ingeniería, podemos agregar la famosa frase del gran Arthur C. Clarke, quien afirma que La ciencia, llegado a un determinado grado de avance, no nos parecerá en nada distinta a la magia) y de como este conocimiento, al servicio de un determinado fin, puede causar más mal que bien (cosa que Angier comprobará de la manera díficil)

La historia es narrada a cuentagotas, fiel al estilo del autor, agregándose a las simetrías antes mencionadas, la mención implicita o explícita a detalles aparenemente intrascendentes, pero que van encajando de a pocos, así como el ocultamento deliberado de ciertos hechos que, posteriormente revelados al espectador, terminan aclarando el panorama, complementado además por la banda sonora, a cargo de David Julyan y una excelente fotografía a cargo de Wally Pfister.

Basada en el cuento de Steven Millhauser y ambientada en una Viena contemporánea a la del film anteriormente mencionado, Eisenheim el Ilusionista (The Illusionist, 2006) es, antes que una historia sobre magia, magos o trucos, un melodrama.

Si bien está narrado con las características de una película de misterio (sobre todo si pensamos en la palabra "detectivesca" junto a esta) son las características del melodrama las que priman, cosa que se hace notoria desde el principio del film, la escena de un tan idilico como bucólico encuentro entre dos jovenes Eisenheim y Sophie, encuentro que, años después, se vuelve a producir.

Y es entonces que Eisenheim (Edward Norton) debe recurrir a todo su arsenal de trucos para retener a su amada Sophie (Jessica Biel) y rescatarla de un tan inconveniente como inféliz compromiso con el Principe de la Corona Leopold (Rufus Sewell) que contará como aliado al jefe de policia, Inspector Uhl (un siempre cumplidor Paul Giamati)

Este film, dirigido por Neil Burger logra captar la atención del espectador, en una historia con un ritmo bien administrado y una fotografía (a cargo de Dick Pope) en la que destacan los tonos cálidos, ya sean de los salones de la realeza en Viena o de la frondosidad de un bosque en una tarde o de las mortecinas luces del teatro donde Eisenheim actúa, constibuyendo así a una estética elegante a la vez que sobría en la que los tiempos se distienden (lentos para un personaje, rápidos para otro) y una interesante dinámica se genera, a partir de la elucubración final del detective Uhl, en la que, finalmente, todo parece cobrar sentido y coherencia, siendo esta explicada de una forma clara y extremadamente lógica, descartándose aquí cualquier aspecto o explicación estrictamente esotérica o mágica queda de lado.

Finalmente, se pueden establecer algunos parálelos entre ambas películas,ya que ambas apelan a la magia no como un fin sino como un medio para lograr algo (el reconocimiento -la venganza- para Angier o Borden o el amor para Eisenheim) con lo cual la "magia" queda establecida claramente como una forma de arte y precisamente como ello es que pervive,aun en nuestros tan tecnológicos días.


Technorati tags: Christopher Priest, El prestigio, the prestige, magos, magia, fantasía, ilusionismo, Christopher nolan

3 comentarios:

Miguel Rodríguez

THE pRESTIGE ME GUSTÓ MUCHO!, LA OTRA NO LA VI!....TA BUENO EL BLOG!!
el personaje de Caine, buenísimo!!!!

Ranking y Circuito Oficial de Competencia

vi las dos películas y confieso que me "desilusionó" uno poco El Ilusionista despues de haber visto El Gran Truco. Ambas son peliculas muy buenas, pero me atraparon más las intrigas de Bale y Jackman, mientras que el final del Ilusionista fue previsible, sin sorpresas.

Santiago

Gracias por comentar:

Estoy de acuerdo contigo Red en el sentido que el Ilusionista,si bien es buena y bonita, no convence del todo, en todo caso, los personajes de "el gran truco" son más, como decirlo, recordables...

  © Blogger template por Emporium Digital 2008

De vuelta hacia ARRIBA